A las políticas gubernamentales de apoyo y fomento del turismo desarrolladas desde la #Comuna, que en la actualidad cuenta con la gestión de Silvio Garbolino y su equipo, ahora el azar le obsequia este fenómeno: un salar en pleno sur de Santa Fe. Parecería que Melincué no deja de recibir bendiciones que la consolida como un lugar turístico: su rica historia, el Casino, la oferta gastronómica, sus atractivos culturales, la visita de aves -que no llegan a otros sitios- como los flamencos andinos o el atractivo de la pesca de pejerreyes.
Sobre el surgimiento de los salares, la secretaria de Turismo local, Claudia Rosental, señaló a #PuebloRegional: "Lo que se puede ver actualmente en la laguna es que, gracias a la bajante, se dio la floración de las sales de Epsom o sulfato de magnesio. Hace mucho no ocurría. Son sales curativas que le dan a la laguna calidad y la característica de ser aguas terapéuticas”.
La ex diputada, quien hoy se desempeña como funcionaria municipal, detalló: "Es un mineral no metálico compuesto por magnesio, fundamental para el proceso de proteínas en el cuerpo humano. Muy útil para la inflamación, artrosis, enfermedades en la piel, entre otros ejemplos".
"Se observa sólo en algunos lugares de la laguna, es un fenómeno esplendido", concluyó